Mientras la disciplina económica moderna se ha institucionalizado y burocratizado, procediendo a conocer mediante la aplicación mecánica de métodos y técnicas formalizadas, las elaboraciones de la economía comprensiva son conocimientos vivos, que se gestan en el diálogo y la comunicación intersubjetiva entre todos los sujetos activos, creadores de la historia y constructores de la economía, la política y la cultura.Mientras la disciplina económica moderna procesa ‘datos’ e ‘informaciones’ recolectadas mediante procedimientos técnicos de los que se espera la validación de las hipótesis formuladas en base a la propia teoría preconstituída, la economía comprensiva procede a través de la experiencia multifacética configurada como una ‘filología viviente’ en la que todos participamos.Mientras la disciplina económica moderna se centra en la cuantificación de la realidad, privilegiando las dimensiones mensurables y aquellas que pueden ser procesadas matemática y estadísticamente, la economía comprensiva se centra en la comprensión de la realidad y de sus procesos, prestando especial atención a los aspectos cualitativos, y especialmente a las novedades históricas.Mientras la disciplina económica modernas buscan en las estructuras las causas del presente, la economía comprensiva analiza las estructuras presentes como resultado de procesos históricos complejos, y busca explicar los hechos y procesos por sus actores, de modo que el futuro se explica por el presente.Mientras la disciplina economica moderna trata de ocultar la subjetividad tanto del ‘objeto’ que estudian como del sujeto cognoscente, para que no interfieran en la dinámica de lo real por conocer, la economía comprensiva pone de manifiesto la subjetividad, precisamente con la intención de intervenir en la historia, de construirla consciente y libremente.Mientras la disciplina económica moderna considera a los hechos y las dinámicas económicas como resultado de variables y de parámetros, separando cuidadosamente los juicios sobre hechos de los juicios de valor y de las apreciaciones éticas, la economía comprensiva considera las realidades económicas como resultado de opciones y de acciones, y en consecuencia incorpora los valores y la ética en el conocimiento, sea en cuanto se las reconoce presentes y activas en la realidad de las empresas, del mercado, del consumo y de la acumulación, sea con la intención de abrir camino a realidades nuevas, superiores a las de la actual economía en crisis.Mientras la disciplina económica moderna construye y determina, como resultado de todo lo anterior, la pasividad histórica de las multitudes, y sirve al control de las masas y de los procesos para que no se desvíen de las racionalidades imperantes y dominantes, la economía comprensiva pretende la activación de todos, en orden a la liberación de las energías conscientes y libres de las personas, y el potenciamiento d las racionalidades emergentes de las que son portadores los creadores de las nuevas economía, política y cultura. Es de estos modos que la economía comprensiva busca comprender lo que está sucediendo, y proyectar soluciones eficaces a los problemas reales y actuales.En el presente libro recogemos algunos escritos en los cuales, fundados en el paradigma epistemológico de la economía comprensiva, abordamos problemas reales y actuales de la realidad económica contemporánea y buscamos los modos en que puedan enfrentarse para el bien de la sociedad y de las personas.